Muchas personas perjudicadas por la covid-19 han arrastrado alguno de sus síntomas largo tiempo. Uno de ellos es la tos seca y su continuidad se conoce como ‘tos persistente asociada a la covid-19’.
¿Qué es la tos?
Médicamente hablando, la tos es una maniobra respiratoria brusca y explosiva para arrojar cuerpos extraños que amenazan a nuestro sistema respiratorio. Por tanto, es un mecanismo de defensa que responde a estímulos irritantes de los bronquios, la tráquea o la laringe.
La causa de la tos suele ser trastornos inflamatorios de las vías respiratorias, pero puede producirse por enfermedades pulmonares, procesos virales, aspiración de cuerpos extraños o situaciones de tensión emocional.
Aunque la tos nos sirve para limpiar las vías respiratorias, protegerlas y defender a nuestros pulmones, también favorece la propagación de infecciones e irrita la tráquea y la mucosa faríngea.
Tos seca y covid-19
Existen varios tipos de tos. De entre ellas, la tos seca y la productiva son las más habituales.
Tos seca es aquella que no produce expectoración, es decir, expulsión de flemas u otras secreciones de las vías respiratorias, y es un síntoma de la covid-19 que sufren entre un 60% y un 70% de las personas afectadas por esta enfermedad.
La covid-19 es una infección respiratoria viral sumamente contagiosa y originada por el virus SARS-CoV-2, un coronavirus de la familia de los betacoronavirus que puede provocar enfermedad respiratoria aguda y neumonía grave en seres humanos, así como procesos de gastroenteritis en algunos animales.
La tos seca es uno de los primeros síntomas de la covid-19 y aparece aproximadamente un día después de infectarnos. Se trata de una respuesta defensiva de nuestro organismo a la detección del SARS-Cov-2 en las vías respiratorias y, aunque comúnmente desparece unos 14 días después de la infección, muchas personas que enferman de covid-19 han continuado tosiendo hasta un año después de haberse infectado.
Cuando la tos es persistente
Existen cuatro razones principales por las que sufrimos tos persistente, cuando la infección ya ha desaparecido de nuestro organismo:
- Las vías respiratorias superiores continúan inflamadas.
- Las vías neurales están afectadas por la inflamación.
- Los pulmones y las vías respiratorias inferiores continúan perjudicados e inflamados.
- El tejido pulmonar cicatriza, generando la enfermedad pulmonar intersticial.
Pero, tengamos precaución ante una tos persistente pues, aunque sucede en algunos casos de covid-19, no es la única enfermedad que la provoca. La tos persistente puede ser síntoma de:
- Asma.
- Cáncer de pulmón.
- Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
- Infección bacteriana secundaria.
- Insuficiencia cardíaca.
- Medicamentos para la hipertensión.
La recomendación de los profesionales sanitarios ante una tos persistente, es acudir al médico a hacernos un chequeo.
¿Qué tomar para aliviar la tos?
Los ataques de tos y la tos persistente son angustiosos para la persona que los sufre. Los fármacos más utilizados para aliviarla o eliminarla son mucolíticos, antitusígenos y expectorantes, siendo los antitusígenos los más indicados para tratar una tos seca.
Para calmar la tos, los remedios más indicados están relacionados con el estilo de vida o la medicina natural. Dentro de los relacionados con el estilo de vida, encontramos:
- Aerosoles nasales.
- Beber agua y líquidos calientes o templados para humidificar el aparato respiratorio.
- Chupar pastillas o caramelos para la tos.
- Dejar de fumar y no meternos en lugares con humo de tabaco.
- Enjuagues salinos.
- Mantener la calma y realizar ejercicios de respiración profunda.
- Tragar saliva.
- Vaporizadores o humidificadores.
De entre las plantas medicinales más adecuadas, destacamos:
- Anís verde: espasmolítico, expectorante, antibacteriano y antifúngico.
- Borraja: con propiedades demulcentes.
- Drosera: destensa los músculos de las vías respiratorias.
- Eucaliptus: broncodilatador.
- Hiedra: expectorante y mucolítico.
- Miel: efecto antimicrobiano y expectorante. Nunca demos miel a un bebé menor de un año.
- Polígala: expectorante y diurética.
- Regaliz: antiviral.
- Tomillo: antiespasmódico y expectorante.
Usar plantas medicinales para tratar dolencias es un proceso de medicación que debe supervisar un profesional sanitario. Consulta en la farmacia qué plantas medicinales son las adecuadas para tu caso particular y cómo utilizarlas correctamente.
Si crees haber contraído la covid-19, solicita un test de antígenos en la farmacia, para cerciorarte, y utiliza las medidas de prevención establecidas por las autoridades sanitarias:
- Distancia de seguridad.
- Uso de mascarilla.
- Lavarnos regularmente las manos, con agua y jabón.
- Test de antígenos.
- En caso de infección, quedarnos en casa hasta que la infección se haya disipado.